miércoles, 25 de septiembre de 2013

VIOLENCIA SIMBÓLICA

He encontrado esto en el periódico Miradas al Sur referido a la violencia simbólica: 

Este modo de actuar del establishment no es original. Ha sido llamado “violencia simbólica” por el sociólogo francés Pierre Bourdieu, quien lo define como “todo poder que logra imponer ciertos significados como legítimos, disimulando las relaciones de fuerzas que los imponen”. Continúa Bourdieu: es una violencia, porque “se traduce por una imposición, un poder”; es simbólica, porque “lo que se impone son significados, relaciones de sentido”; es arbitraria porque “refuerza la desigualdad” (por ejemplo, incluye y excluye de modo arbitrario a grupos sociales, pero afirma que esta discriminación es aceptada por todos).
En definitiva, “permite la institucionalización de un poder desconocido, que logra imponer como legítimos ciertos significados y afirmaciones, ocultando las relaciones de fuerzas que están en su base”. Tiene varias características. Ante todo, quienes la sufren ignoran que están siendo manipulados y adoptan una actitud pasiva de consentimiento implícito. Es comprensible: “Los dominados sólo disponen, para pensar esta dominación, de las categorías de pensamiento de los dominadores”.
Sostiene Bourdieu que la violencia simbólica señala la ubicación de cada grupo social en su actividad, y que esta violencia no es consciente para quien la sufre. No se apoya en una relación entre personas sino en una dominación estructural, que resulta de los capitales materiales y culturales que posea cada uno. Además, genera violencia, porque no es percibida por los agentes; es fuente de un sentimiento de inferioridad o de insignificancia que se sufre y que no es objetivo. Concluye Bourdieu: “La violencia simbólica se instaura por medio de la acción pedagógica, pero también por toda institución legítima, como la televisión, el cine, los diarios”.
Como lo ha sostenido Maurice Godelier, la historia demuestra que en los procesos de dominación, más que la violencia directa ejercida por los dominadores, ha influido el consentimiento de los dominados. “El consentimiento es la parte del poder que los dominados agregan a la que los dominantes ejercen directamente sobre ellos.” Puede agregarse que en muchos casos, ese consentimiento es el producto de la “violencia simbólica”.
Un problema fundamental es el que surge del deslizamiento de la “violencia simbólica” a la “violencia real”. Ésta ha sido una de las mayores tragedias de la historia argentina y latinoamericana. Para que se entienda mejor, veamos tres ejemplos.
Comencemos en la época de auge de las conquistas coloniales, con la violencia simbólica que consistía en considerar a los indios o negros como seres subhumanos. Entonces, en muchos casos, la violencia real los exterminó; y hubo quienes sostuvieron que no se violaba el mandamiento de “no matar”, que se refería sólo a los humanos.
Sigamos con la violencia simbólica contra la mujer, a la que se ubicaba en una jerarquía humana y social inferior a la del hombre. Luego, a través de los siglos, la violencia real le negó la mayor parte de los derechos civiles y políticos.
Con respecto a la participación popular en el gobierno, durante mucho tiempo la violencia simbólica se opuso al voto de la mayoría de la población, porque no reunía las condiciones de riqueza o de instrucción necesarios (en verdad, porque representaban a otros grupos sociales). La violencia real, muchas veces los proscribió formalmente o cometió fraudes electorales o golpes de Estado para arrebatarles el gobierno que ganaban por elecciones.

También pongo unas fotos que reflejan este grave problema: 





4 comentarios:

  1. Buena búsqueda! Gracias por compartirla (aunque hubiera bastado con un enlace). Y tú, qué piensas?

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    1. Yo considero que a las personas no hay que juzgarlas por su apariencia externa sino que hay que profundizar mas adentro hasta llegar al corazón, que es donde de verdad se conoce a las personas. Una vez ya has conocido a esa persona por su interior podrás juzgarla de una manera o de otra, o simplemente si no es alguien con quien conectes pues no compartas nada con esa persona pero en ningún momento molestar, ofender o agredir psicologicamente a esa persona. En definitiva, que todos somos iguales en cuanto a nuestro interior y deberíamos tener una oportunidad de demostrar como somos y no que nos juzgen por lo que aparentamos.

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  2. Estoy muy de acuerdo contigo Sergio con todo lo que has dicho y a lo cuál yo añadiría que, aunque vivimos en una sociedad en la que todavía se puede observar este gran problema, poco a poco es algo que ha ido dejando atrás...
    Nombrando algún ejemplo del artículo que has compartido pienso que:
    Las mujeres ya no están infravaloradas ni colocadas en un escalafón inferior al hombre, es algo que bajo mi punto de vista está casi logrado! Aunque todavía hay diferencias, por ejemplo, según la cultura.
    También, podemos ver que el racismo, como tal, también es un concepto que creo que ya no es tan destacable. Al igual que con el ejemplo anterior, hay gente para todo, pero pienso que es algo que va en continuo descenso hacia un camino mucho más positivo.

    En fin, solo quería aportar algo más a tu comentario sobre la Violencia Simbólica.

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    1. Gracias Javi!! Tienes razón en cuanto a lo de las mujeres, por suerte ya es un tema que aquí está casi superado. Pues si, esperemos que esto vaya a mejor!!

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